JEAN - MICHEL BASQUIAT

 
















Jean-Michel Basquiat

Jean-Michel Basquiat (1960 - 1988) pintor estadounidense que nació en Brooklyn, Nueva York, el 22 de diciembre de 1960.

Su padre, Gerard Basquiat, era un contable haitiano de respetable solvencia económica, y su madre, Matilde, era una diseñadora gráfica puertorriqueña de gran prestigio profesional. Jean-Michel creció en un entorno familiar desgarrado, sus padres se divorciaron y por esta situación tuvo que cambiar muchas veces de escuela. Ya en su juventud entró en contacto con la subcultura de la gran ciudad, relacionada con el uso de drogas y las bandas callejeras. En 1977, junto con Al Díaz, se introdujo en el mundo del graffiti, pintando en los vagones del metro y por las zonas del SoHo, barrio neoyorquino donde proliferan las galerías de arte.

Seguía dedicándose al graffiti, sus pintadas y escritos tenían mucha carga poética y filosófica, pero sobre todo satírica. El pseudónimo de su álter ego compartido con Al Díaz (SAMO son las siglas de SAMe Old shit, es decir, "la misma vieja mierda", "la misma porquería"), con el que ambos firmaban sus tags y graffitis, con mensajes crípticos, fue decisivo en su vida.

Estos murales llevaban inscripciones como “SAMO salva idiotas” o “SAMO pone fin al lavado de cerebro religioso, la política de la nada y la falsa filosofía”. Un artículo sobre la escritura callejera de SAMO publicado en The Village Voice fue el primer indicio de que el mundo del arte se interesaba por él.

En 1986 Basquiat viaja a África y expone en Abiyán (Costa de Marfil). En noviembre de ese mismo año realiza una gran exposición (más de 80 obras) en el Museo Kestner-Gesellschaft de Hanóver, convirtiéndose, con 25 años, en el artista más joven que exhibe en ese museo. En 1988 se instalan exposiciones en París y Nueva York, y en abril de ese mismo año trata de abandonar sus adicciones y se retira a su casa de Hawái. Vuelve a Nueva York en junio, anunciando que se ha liberado de las adicciones, pero el 12 de agosto de 1988, a los 27 años, muere por sobredosis de heroína, siendo el artista visual negro más exitoso en la historia del arte afroamericano.

A lo largo de su breve pero intensa carrera artística realizaría más de 40 exposiciones personales y participaría en alrededor de 100 colectivas. La autopromoción y el reclamo publicitario fueron para Basquiat factores prioritarios, como con anterioridad lo habían sido para Andy Warhol o para Julian Schnabel.

El neoexpresionismo se fue imponiendo al apropiacionismo, en parte gracias a la pujanza económica que elevó a altas cotas el precio del arte y, especialmente, de la pintura, y en parte gracias al apoyo de galeristas y coleccionistas. La crítica, sin embargo, no fue unánime en su valoración, y fue habitual la denuncia de la falta de base teórica del discurso neoexpresionista. Se afirmó que el arte que practicaban los neoexpresionistas carecía de cualquier significado político o social, era sólo mercancía y, por tanto, objeto de los vaivenes y fluctuaciones del mercado. La pintura neoexpresionista quedaba reducida a un producto de consumo y, como tal, a un hecho creativamente descalificado y vulgar.